Mayor acceso a la capacitación para los futuros supervisores forestales

Los supervisores forestales de OSINFOR cumplen la importante misión de constatar el cumplimiento de los planes de manejo del bosque de las concesiones y otros títulos habilitantes aprobados para el aprovechamiento sostenible de los recursos forestales. Por ello, el OSINFOR constantemente desarrolla cursos para los supervisores en ejercicios y para potenciales candidatos a ejercer en el futuro este rol.

En esta oportunidad, entre el 21 de agosto y el 12 de setiembre, se desarrolló el quinto Curso de Especialización Profesional en Supervisión del Aprovechamiento Forestal. Esta edición fue la primera en modalidad virtual y también la primera vez que participó el programa FOREST de USAID y el Servicio Forestal de los Estados Unidos como aliado estratégico sumándose al trabajo de OSINFOR y de la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana – UNAP. Teniendo en cuenta la poca oferta formativa en nuestro país especializada en supervisión, la realización de este curso tomó en cuenta el perfil que OSINFOR requiere constantemente para las tareas de supervisión. En el actual contexto de pandemia, el curso ha requerido una adaptación metodológica para permitir la participación virtual de los alumnos a nivel nacional.

El curso estuvo compuesto por 5 módulos: 1) Módulo introductorio, 2) gestión de los recursos forestales y de fauna silvestre, 3) estudios especializados, 4) prevención y 5) supervisión forestal. Un total de 110 horas académicas divididas en 56 horas sincrónicas y 54 asincrónicas. El curso estuvo dirigido a profesionales de la carrera de ingeniería forestal y afines con el objetivo de incrementar el número potencial de profesionales especializados en supervisión forestal que pueden incorporarse a OSINFOR.

Para Antonio Durand, coordinador de capacitación forestal y de fauna en el OSINFOR, el apoyo del Servicio Forestal de los EEUU y USAID, ha sido “trascendental” en esta etapa, “para adaptar las metodologías, para el desarrollo de plataformas y la elaboración de documentos para desarrollo de capacitaciones”. En particular porque se cubre un vacío: la capacitación de capacitadores. “Nos ha ayudado a aprender como transmitidores (sic) y desarrolladores de conocimiento para mejorar en nuestras técnicas de capacitación”.

El curso tuvo gran acogida: se presentaron inicialmente 283 postulantes, de los cuáles 142 cumplían con todos los requisitos y pudieron pasar el examen de admisión. Al final se seleccionaron 30 alumnos procedentes de diferentes regiones: 9 de Ucayali, 2 de Amazonas, 3 de Cajamarca, 3 de Huánuco, 3 de Junin, 5 de Lima, 2 de San Martín, 1 de Madre de Dios y 1 de Loreto. 35% de las participantes son mujeres, lo que da cuenta de un pequeño avance en la presencia femenina en puestos claves para el sector forestal. Los participantes trabajan en el sector público, ya sea en organismos nacionales o en el gobierno regional y un grupo importante ejerce la regencia forestal.

Para Fredy Ramirez, botánico docente de la UNAP, quien ha contribuido a llevar a cabo este esfuerzo “El apoyo de FOREST es fundamental para conseguir los objetivos que como academia hemos querido y también han querido los usuarios del sector forestal.” Para él, el aporte reside principalmente en que “a nivel del Estado es difícil tener financiamiento para cubrir todo este tipo de esfuerzo. USAID y el Servicio Forestal de los EEUU, a través de FOREST, contribuyen de manera muy buena no sólo financiando esto, sino también con especialistas, en el fortalecimiento de capacidades de docentes universitarios, de docentes de pregrado, y de estudiantes de posgrado”.

Además de la adaptación virtual, este curso plantea una propuesta innovadora frente a problemas del sector. En el Perú, y en el sector forestal, la alta rotación de funcionarios, que se expresa en el poco tiempo que permanecen en sus cargos, limita la capacidad estatal. Una formación mixta que desarrolla material virtual, permitirá que los nuevos funcionarios accedan a la formación de manera digital en el tiempo que ellos mismos requieren.

Una segunda innovación en el curso, fue la incorporación de un módulo sobre ética que abordó el tema de la corrupción, buscando con ello contrarrestar prácticas ilegales en el sector. Se espera que los participantes contribuyan en el proceso de trazabilidad de la madera y que tal como señala Fredy Ramirez “logren una transformación verdadera creando conciencia de la importancia de generar datos verdaderos para planes de manejo reales”.

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